soledades entre columnas de piedra
vacíos entre las personas del mundo
las cumbres de la tierra, sus árboles
venas de fuego que mueren en el mar
un silencio eterno en la cima del cielo
pensamientos perdidos bajo palabras
instantes que tocan la piel del futuro
otras manos, sentidas por última vez
las nubes se desmoronan y son lluvia
espacios vivos en volúmenes sin nada
bosques de noche, un verde sin ocaso
la luz de una estrella que ya no existe
verdades absolutas entre los detalles
las miradas y su amor incandescente
desvíos de vida, la soledad inminente
ley del sol en el desierto, y un charco
libre misericordia de un océano cruel
el fruto sanguíneo de labios efímeros
sueño fugaz, los ríos ya desembocan
las hojas mojadas se surten de brillo
el suelo se nutre y las raíces respiran
la gente vive y se abraza con fuerza
ceñido, todo está aquí y es completo
de día se siente en todos lados calor
ya con compañía, fosforece la noche
nuestra piel está cubierta de energía
somos indistinguibles entre nosotros
